Hablemos de trabajo

Tras el final de Innubu, empecé a trabajar a mediados de marzo. Y estos días, ya decidí dejarlo, sin tener siquiera otra oferta o proyecto.

Nunca antes había estado tan poco tiempo en una empresa. No me enorgullezco de ello, como tampoco lo haría permanecer en un sitio por el simple hecho de estar.

Este post no es un “Porqué he dejado X”. El caso es que llevo algún tiempo queriendo escribir de este tema en mi blog y creo que ahora es el momento.

Lo que es el trabajo para mí

Si un tercio de nuestro día, y por extensión casi de nuestra vida, estamos trabajando, ¿no deberíamos estar al 100%?

Con estar al 100% me refiero a estar ilusionado, a compartir la visión directiva y organizativa, y entregarte en tus funciones. Que cada día luches por mejorar el producto que desarrolle la compañía y también a ti mismo como profesional.

El día en el que esa lucha mengüe o no le veas sentido, en mi opinión es el momento de parar. No quiero sentir que cada día estoy perdiendo el tiempo o que me estoy marchitando.

Al final, concibo el trabajo como una forma de mejorarte a ti y lo que te rodea a través de tu empresa. Si no hay mejora, no hay trabajo.

Lo que no es

Para mí, no es un sitio donde pasar 8 o 9 horas diarias sentado esperando a final de mes. Que por cierto, necesitarás una buena silla.

Me da igual que hablemos de contratos indefinidos, de un rango salarial u otro o de otras cosas que se ofrezcan. El dinero, tipo de empresa o el tipo de contrato da igual. Prefiero incerteza estando a gusto, que la seguridad estando mal.

Tampoco es donde esperar otra oportunidad, creo que las oportunidades se crean o se buscan. Y si entiendes oportunidad por oferta de trabajo, creo que vendrán por habilidades o portfolio.

Tampoco donde aguantar o resistir. De ninguna manera. De ningún modo. No concibo el trabajo como una tortura, sacrificio o sufrimiento.

Y con los años, no voy aguantando ciertas políticas de empresa. Entiendo que habrá motivos para ellas y gente que las crea. Lo respeto. Pero muchas de ellas no las puedo aceptar a estas alturas de la película.

¿Qué?

Entiendo que haya gente pasándolo mal y que no pueda entender esto. En mi entorno cercano ocurre. De hecho, esta vez ha sido la primera que he llegado a dudar de mí mismo y de mi decisión. Cosas como:

“¿Ya? ¿Otra vez cambias de trabajo? Joer, no aguantas nada”

La respuesta la puse arriba. Para mí, un trabajo no es aguantar. Si no, me hubiera hecho funcionario o algo así. Y si en unas semanas ves de qué va el percal y no va a cambiar, no hace falta permanecer más tiempo.

“Claro, como los programadores tenéis 1.000 ofertas, pues abusas”

Esta vez no tengo una oferta.

Creo que esto que escribo se puede aplicar a cualquier sector y persona. Se trata más de valores, que de profesiones.

Creo que un pintor, un dependiente o un electricista, también puede progresar y crecer.

Y si no pudiera encontrar otro sitio donde encontrarme feliz, cambiaría de profesión o yo que sé… ¿pero de verdad vale la pena ser infeliz? ¿cuánto te tienen que pagar al año para aceptarlo?

“Es que un trabajo es así, todo no puede ser perfecto.”

Supongo que siempre habrá margen de mejora, pero no puntos graves o de concepto.

Si crees que aún así hay que tragar, de verdad, te admiro pero yo no puedo, tendré ese defecto, no soy capaz de resistir cosas que creo ciegamente que está mal.

Voy a poner un ejemplo, inapropiado seguramente, si ves maltratar a alguien y la mayoría te dice que eso es normal, ¿qué pensarías? ¿dejarías influenciarte y cambiarías de opinión? En mi caso no, yo lo veo así de claro.

De verdad. Necesito compartir esto. Por momentos creí haberme convertido en un bicho raro que empieza a no encajar en ciertos sitios. Supongo que solo encajo en startups o con otra mentalidad.

Pero es que estoy convencido en lo que he escrito. Mientras crea en ello, seguiré luchando por encontrar un sitio donde encontrarme a gusto y poder desarrollarme.

Afortunadamente, esta misma semana tuve un par de conversaciones largas con algunos ex compañeros y amigos del sector y creo haber recuperado la visión nítida: aún no estoy loco, pero estoy en el camino difícil.

Déjame un comentario con tu opinión.

Y si alguien no se ha escandalizado con esto y esta buscando un Javascripter, estoy disponible.

Imagen bbalaji via Flickr